viernes, mayo 23, 2008

Caos



Cuando la mano extendida se vuelve puño contra el tablero. Cuando llega el final, pero nosotros seguimos deambulando como fantasmas sobre el tablero. Cuando el seísmo mueve tus cimientos, cuando agita absolutamente todo lo que crees, la lluvia arrasa más allá de lo que tiene sentido, el huracán azota detrás y delante de nuestro grito. Cuando no sabemos que gritar, conscientes de que con las pesadillas es inútil negociar. Cuando la soga alrededor de nuestro cuello está sujeta por la ira. Cuando la ira es la mirada de una familia que ha perdido su hogar, su vida... Apago la televisión, me relamo las lágrimas y me rasco, en silencio, como un mono enfermo en busca de un interruptor en mi propio cuerpo.

Denisse*

2 comentarios:

Anónimo dijo...

vamos por un cafe? todo va a salir bien.. te quiero niña linda, hablamos.

te espero ok?

Anónimo dijo...

pucha gaia que onda? ya pu si no fue tu culpa no se pudo no mas, trata de conectarte mas tarde ni me pescaste ahora, juntemonos mas rato o en la noche..te adoro monga, pendeja del as cuidat =P